Entrevista a Madeline Ceballos

Éxito. Una palabra que en tiempos actuales es utilizada con más frecuencia que cualquier otra. La escuchamos de la boca de los más “grandes” y en la de los más “pequeños”, una palabra de cinco letras que millones desean que sea conjugada antes o después de sus nombres. Todos quieren ser exitosos, todos queremos ser exitosos.

¿Pero qué es el éxito? ¿Será que nos hemos sumergido tanto en la búsqueda de él, que ni siquiera nos dimos cuenta de qué es realmente?

Lo cierto es que, el concepto de éxito es uno muy unipersonal, en donde cada individuo ha de determinar en dónde se encuentra o lo que significa para sí. De modo que solo seremos capaces de hablar única y exclusivamente del nuestro.

Esta es la razón por la que estás leyendo esto, para conocer la increíble historia de éxito, de una increíble mujer.

Madeline Ceballos

Una mujer que ha entendido que el éxito ni se hereda, ni se adquiere al contraer nupcias, una mujer que ha entiendo que el éxito ni siquiera se gana, sino que este se trabaja. Y en esta oportunidad ella quiere hablarles desde su corazón, de cómo ella ha hecho esto.

Contarles de cómo las altas y bajas de la vida pueden grandes lecciones y, sobretodo, a levantarte una vez que has caído.

Foto de Madeline Ceballos

Y es que, ya muchos conocen cómo inicia MAKA, pero pocos conocen como inicia Madeline. Entonces, ¿Por qué no empezar por ahí?

P: ¿Quién es Madeline Ceballos, su historia, su persona?

Madeline: Soy una mujer sensible y llena de sueños, que agradece todos los días el regalo de estar viva.  Creo firmemente que cada reto es una oportunidad de aprendizaje y que un error no es un error si solo se comete una vez.

Entrevistador: Siempre es refrescante conocer la persona detrás del telón, aquellos que se encuentran dando el todo por el todo para hacer que aquello que emprenden prospere.

P: ¿Qué es y qué lugar ocupa el emprendimiento en la mente de Madeline Ceballos?

Madeline: Es cuando descubres tu talento, eso que nadie puede hacer de la manera en que tú lo haces, y lo pones al servicio de los demás haciendo que este sea la solución al problema de otras personas. En fin, es crear soluciones y que te paguen por eso.

Entrevistador: Emprender ha de ser una de las sensaciones más gratificantes que existen, pero sabemos que no todo es miel sobre hojuelas y que, existen retos que van más allá de lo que el público común pudiese imaginarse.

P: En su caso, ¿Cuáles han sido algunos de esos retos que sacudieron un poco o mucho su mundo?

Madeline: Han sido muchos, pero de cada uno he aprendido algo. Creo firmemente que lo que no te mata te hace más fuerte y que encontrar obstáculos en el camino y poder superarlos es parte del crecimiento de cada persona. Cuando un producto es exitoso, te expones a que aparezcan personas que les gusta echar por tierra tu trabajo, eso es normal porque hay de todo en este mundo y cada quien da de lo que lleva dentro.

Yo, gracias a Dios, tengo muy claro mis valores y eso repercute en mi marca. La calidad es lo que nos diferencia y los testimonios de cientos de personas que saben, por su experiencia, que nuestros productos cumplen con su promesa de venta. Por eso el mayor de mis aprendizajes ha sido enfocarme como un rayo láser en seguir trabajando sin desviar mi atención de lo que realmente importa, que es crear valor para mi mercado.

Entrevistador: Sin lugar a dudas a nuestras vidas han llegado y seguirán llegando dificultades que nos pondrán a prueba, sacando lo mejor o peor de nosotros, entonces,

P: ¿Cuáles son los valores o principios que la mantienen firme, muy a pesar de todo?

Madeline: Entre los valores o principios que más rigen mi vida están:

Entrevistador: Excelente, que le parece si damos un giro de 180 grados, para luego dar la vuelta completa y volver hablar de la familia, hay una pregunta que dados los tiempos en que vivimos, es estrictamente necesario hacerla,

P: ¿Cuál cree usted, es el rol que ha de ocupar la mujer en el mundo empresarial de hoy?

Madeline: Creo que ser mujer me ha ayudado, porque estamos viviendo la era de la mujer empoderada, de la mujer que sabe lo que quiere y lo que no quiere. De la mujer que no se queda callada, de la que no se conforma con ser madre, esposa y ama de casa, sino que trabaja en su desarrollo profesional y esto nos ha merecido el respeto de una sociedad altamente machista. 

Nos hemos destacado en todas las áreas que desempeñamos, porque tenemos esa facilidad de crear, de dar amor, de servir y esto que nos hace especiales y únicas.

Entrevistador: La siguiente pregunta tiene más o menos la misma línea,

P: ¿Cuáles recomendaciones les darías a las mujeres que quieren emprender y no saben por dónde empezar?

Madeline: Que se enfoquen en dar valor y servir. Emprender desde el servicio es lo que lleva al éxito. Todas tenemos un talento que nos hace especiales, ponerlo al servicio de los demás nos lleva a cumplir nuestro propósito en la vida. Busca personas que sean fuertes en lo que tú eres débil y forma tu equipo. Y recuerda, como dice el Papa Francisco: La vida es buena, pero es aún mejor cuando otras personas son felices gracias a ti.

Entrevistador: No es un secreto para nadie que aún queda mucho trabajo por hacer. Todavía existen muchos lugares para que las mujeres puedan ocupar. ¡Ojo! Este no es un discurso feminista, es simplemente la exposición de una realidad.

Entonces para terminar de dar ese giro de 360 grados y aterrizar en el mismo lugar en donde iniciamos,

P: ¿Qué rol tiene la familia para usted? Lo pregunto, porque MAKA es una empresa constituida por usted y sus hijas

Madeline: Mi familia es mi más grande inspiración, es el motor que me impulsa a dar lo mejor de mí en todo lo que hago.

Haber tenido siempre el apoyo de mi familia ha sido lo que me ha empujado a dar la milla extra. Tener el gran privilegio de trabajar con mis hijas en nuestro proyecto es algo de gran satisfacción y alegría para mí. Nos complementamos a la perfección porque una tiene lo que a la otra le falta.

Entrevistador: No cabe duda de que hay muchas notas que tomar de la vida de esta joven mujer luchadora. Yo ya tengo las mías. Ya como última pregunta,

P: ¿En qué momento sintió que lo había logrado?

Madeline: Cuando comencé a recibir los testimonios de las personas que usaban mi producto.  En ese momento me di cuenta que había descubierto mi propósito en la vida, y que, con mi talento, estaba tocando la vida de las personas ayudándolas a recobrar su seguridad y autoestima. En ese momento supe que lo había logrado.         

En conclusión…

La vida no es necesariamente un jardín de rosas, la misma viene con un sin número de dificultades que pueden y nos van a poner de rodillas. Pero muy a pesar de ello, hemos de encontrar las fuerzas no solo para salir adelante, sino también para motivar a otros a salir adelante.

Esto es precisamente lo que ha hecho Madeline, quien, a través de una crisis, encontró una manera de inspirar a otros haciendo uso de sus productos de belleza. La sociedad necesita unas cuantas Madeline, personas que estén dispuestas a servir a los demás en cuerpo y alma buscando mejorar sus vidas.

[]